Saber usar, cuidar y mantener en buen estado las sillas de tu escritorio contribuye a que tengas una buena postura y asegura una larga vida útil. Aquí te ofrecemos una serie de consejos para saber cómo usar y mantener tus sillas en perfecto estado.
Consejos de uso
Párate al lado de la silla y ajusta su altura hasta que la parte superior del asiento quede justo debajo de tu rodilla.
Regula la altura para que al sentarte, el borde superior de la pantalla o monitor quede a la altura de tus ojos o un poco más abajo.
Tu cabeza y cuello deben estar en posición recta, los hombros se mantienen relajados y tus codos deben quedar pegados a tu cuerpo y doblados, para que tus brazos y antebrazos formen un ángulo recto.
Tus piernas deben quedar dobladas en un ángulo recto, y los pies apoyados en el suelo. Si no alcanzas, puedes usar un apoyapies, de preferencia regulable y antideslizante.
Consejos de seguridad
Para un uso seguro de la silla de escritorio es fundamental respetar el peso indicado por el fabricante, y no sobrepasar esta carga.
No uses la silla para fines diferentes de los que establece el diseño, incluso subirte de pie sobre ella puede causar daños a su estructura y peor aún provocarte un accidente.
Consejos de mantenimiento
Revisa y ajusta los tornillos cada cuatro meses, o más frecuente si le das un uso muy intenso a tu silla. Así evitas que con el movimiento se suelte un tornillo y se desprenda una de sus partes, con el riesgo de caerte mientras estás sentado.
Para que las ruedas se mantengan giratorias, y se desplacen suavemente hay que limpiar las hilachas y pelusas que se acumulan en ellas. Esta es una limpieza que hay que hacer todos los meses, sobre todo si la silla está sobre una alfombra.
Comienza la limpieza sacudiendo o aspirando el tapiz, fíjate de aspirar en la unión del asiento con el respaldo que es donde queda atrapado más polvo y pelusas. Si el tapiz es de ecocuero la puedes limpiar con un paño húmedo, si es de tela puedes usar productos especiales para textiles.